Por el Comité editorial de IVI Santiago
Algunos dicen que es sólo una moda, pero para la mayoría el empoderamiento femenino es mucho más que eso. Empezó como una tendencia que tímidamente se utilizaba para referirse a mujeres que destacaban en ámbitos históricamente masculinos, como nuestra primera Presidente de la República o primera Presidente del Senado.
Pero poco a poco, este empoderamiento fue trasladándose a otras esferas de la sociedad para llegar a reflejar a todas las mujeres de nuestra vida cotidiana. Hoy todas están empoderadas.
Vivimos un periodo en el que, a nivel mundial, las mujeres se hacen escuchar; ya no callan ante injusticias y desigualdades, se protegen unas a otras, sacan la voz por aquellas que no tienen voz, y luchan día a día por erradicar la desigualdad de género.
Sin embargo, la deuda pendiente es aún grande, y hay mucho por hacer en todos los aspectos del mundo laboral de las mujeres, incluida la maternidad.
En este contexto, clínica IVI Santiago organizó un evento gratuito, IVI Mujer Online “Empoderamiento y transformación en el mundo laboral. ¿Cómo afecta la maternidad?” un encuentro de mujeres para mujeres, para que conversemos y compartamos nuestra experiencia sobre trabajo, maternidad y la siempre difícil búsqueda de equilibrio. IVI, como empresa líder a nivel mundial, tiene el compromiso de concientizar sobre la involución de la brecha de género a nivel económico y laboral, destacando las posibilidades que tiene hoy la mujer a la hora de planificar una familia
¿Cuál es la situación de la mujer Chile?
El apoyo entre mujeres es clave también en lo profesional. Está comprobado que las mujeres que se apoyan entre sí de forma genuina y desinteresada tienen mayor éxito en los negocios. Esta hermandad entre ellas se conoce como sororidad.
Si hablamos de la realidad laboral de la mujer chilena, la verdad es que las últimas cifras son dramáticas. Según indica ComunidadMujer, Chile se ubica en el lugar 57 de 153 economías (WEF, 2020), pero desciende a la posición 111 cuando se mide la participación y oportunidades económicas para las mujeres. Dato que pone en evidencia la brecha de género: menor participación laboral; baja representación en cargos de poder y toma de decisiones; sectores de la economía segregados por sexo; falta de políticas de corresponsabilidad; brecha salarial de género, entre otros, según resalta la organización. También se destacan algunos datos importantes:
• A septiembre del 2020, del millón 837 mil personas que perdió su trabajo, 899 mil fueron mujeres, es decir, el 48,9%. El 88% de esas mujeres, salió de la fuerza de trabajo de manera más o menos definitiva (versus 73% de los hombres).
• Otras cifras de las brechas entre mujeres y hombres chilenos en el campo laboral: menores salarios (casi $200.000 de diferencia), escaso acceso a ingresos propios (76%) e informalidad en el trabajo (34%).
¿Qué ocurre en la alta dirección? ¿Es más difícil aún compatibilizar la maternidad con algún cargo gremial o gerencial?
Según la Harvard Business Review, “la presencia de la mujer en la alta dirección mejora la competitividad, la toma de decisiones, fomenta la innovación y la creatividad, mejora la colaboración y la fidelización, y son más resistentes a la crisis. Además, la inteligencia colectiva de un grupo aumenta a medida que se incorpora la representación femenina”.
Maternidad y Trabajo: ¿mundos opuestos o complementarios?
El embarazo y la maternidad representan un desafío enorme para cualquier mujer, pero el mismo podría duplicarse para quien además desea una carrera profesional.
Es que el trabajo de llevar adelante un embarazo y cuidar de los niños, por más gratificante que resulte, es arduo y requiere de un trabajo de responsabilidad compartida de la pareja o de colaboración constante de los allegados a esa madre, en caso de ser soltera. Cuando el entorno cultural, legal, económico, sentimental y social no acompañan la decisión de una mujer de asumir su maternidad y de trabajar, las dificultades crecen.
Hay un actor que es clave en el camino del éxito profesional y maternidad. Las redes, el apoyo, la corresponsabilidad cuando existe. Ya no se habla de “mi marido o mi pareja me ayuda en la casa o con los niños”. Hoy lo que la busca en paridad, corresponsabilidad, equidad en las labores de la casa, que son tanto o más demandantes que las propias responsabilidades profesionales.
Ejercer una carrera profesional y tener hijos son dos responsabilidades que se pueden llevar a cabo sin ningún problema, siempre que las personas se organicen, cuenten con una adecuada distribución de actividades y, sobre todo un buen partner o red de apoyo.
Muchas mujeres pueden sentir, de esta forma, que deben elegir entre sus logros profesionales y la maternidad. La razón es que los llamados “años fértiles” de la mujer, suelen coincidir con los años en los que se crece laboralmente. Es así como en algunos casos, el embarazo se posterga o la carrera se abandona.
¿Ser madre implica perder o transar nuestro espacio, nuestra libertad, o dejar en segundo plano los estudios? Lo políticamente correcto es decir “no, por supuesto que no”, pero la verdad es que en el momento en que la mujer decide embarcarse en la aventura de la maternidad sí se produce un stop, una pausa. Pero, por otro lado, la maternidad es un estímulo para salir adelante, y no debe considerarse como un obstáculo para el crecimiento profesional.
Tratamientos de Reproducción Asistida y la posibilidad de elegir
¿Y qué ocurre cuando esta posibilidad de perfeccionamiento laboral es en paralelo con el peak reproductivo de la mujer? Porque no hay que olvidar que, además, las mujeres tienen la carga del reloj biológico.
Cuando se desea transitar un embarazo, hay muchos factores a considerar. Entre ellos, la edad y la salud materna. Por eso, cuanto más espera una mujer para ser madre, mayores podrían ser los riesgos asociados a un embarazo buscado de forma natural.
Es que, a partir de los 32 años, y especialmente desde los 37, la calidad y cantidad de óvulos que tiene una mujer decrecen drásticamente.
Es así como en estos casos, la mujer no tiene por qué tomar riesgos innecesarios, y puede optar cómo y cuándo ser madre. Esté o no en pareja, y aunque no tenga la “edad ideal”, la mujer puede desarrollarse profesionalmente y también, ser madre.
Hay una herramienta que toda mujer debe conocer, para poder tomar decisiones informadas y planificar de la mejor manera su vida personal y laboral. Y esa herramienta es la Preservación de la Fertilidad, tratamiento que es posible gracias a la técnica de la vitrificación.
Esta técnica es útil en los casos de que la mujer necesite tiempo para elegir la maternidad, pero quiera preservar sus óvulos más jóvenes para cuando los precise. Se trata de la extracción de los mismos, previa estimulación folicular, y su preservación con sustancias crioprotectoras. De esta forma, puede utilizarlos en el futuro, mediante un tratamiento de Fecundación In Vitro (FIV).
Para aquellas mujeres, que no han podido o no han querido preservar su fertilidad, y luego de lograr sus distintos objetivos y sueños comienzan a pensar en la maternidad hay disponibles una seria de tratamientos para ayudarlas también. Las opciones van a variar de acuerdo a la historia clínica de cada mujer, y son las siguiente:
IVI Mujer, un evento para tener en el radar
Para aquellas que busquen conocer más sobre la situación laboral de las mujeres en Chile y oír historias inspiradoras sobre trabajo y maternidad, el 25 de mayo se realizará IVI Mujer Online, moderado por Angélica Castro.
Las panelistas de este evento único serán:
Médica ginecóloga especialista en Reproducción Asistida en IVI Santiago. Realizó su formación en Reproducción Asistida en Europa, tanto en Francia y Bélgica, está casada y tiene 2 hijas. Para ella el equilibrio entre lo laboral y personal ha sido un gran tema, y además nos pondrá al día sobre las herramientas que tenemos en la actualidad para planificar nuestra maternidad.
La actividad gremial es uno de los intereses de la Gerente General de Inmobiliaria Exxacon y parte del Comité de Mujeres en Alta Dirección de la Cámara Chilena de la Construcción. Líder innata y movilizadora de equipos, las palabras que mejor la definen son apasionada e intensa, tanto en su vida familiar como profesional. Su marido es su partner, llevan 30 años juntos, y son papás de una pareja de mellizos y una mujer. Su papá fue clave en su desarrollo profesional, indicándole que nunca se pusiera límites y que fuera inquieta profesional e intelectualmente.
Gerente General de la marca de vestuario infantil Limonada, directora de Endevor, y presidenta de la Asociación de Marcas de Retail. El 2006, estando aún en la universidad, se hizo cargo de Limonada, el emprendimiento familiar que sus padres habían construido con mucho esfuerzo en 1989. Hoy cuentan con 115 tiendas en Chile y el año pasado, en plena pandemia mundial, abrió una tienda en Miami. Gran promotora de la igualdad de oportunidad, empuja temas como la relevancia de fomentar el emprendimiento femenino, la participación de mujeres en directorios y puestos de liderazgos. Mamá de Martina y Matías, y esposa Chris.
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