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FIV (Fecundación In Vitro) y PGT (Preimplantation Genética Testing) son dos técnicas que se combinan en un mismo tratamiento con el objetivo de aumentar el porcentaje de éxito por transferencia y la probabilidad de tener un bebé sano en casa.
FIV (Fecundación In Vitro) y PGT (Preimplantation Genética Testing) son dos técnicas que se combinan en un mismo tratamiento con el objetivo de aumentar el porcentaje de éxito por transferencia y la probabilidad de tener un bebé sano en casa.
El PGT es una técnica con la que se analiza genéticamente al embrión con el fin de identificar anomalías en un número de cromosomas (aneuploidías). En IVI Santiago se aplica esta tecnología durante el tratamiento FIV como herramienta adicional para la selección de embriones y así poder cumplir tu sueño, tener un bebé sano en casa.
Con el PGT la tasa de éxito aumenta hasta un 70 % gracias a la posibilidad de seleccionar los embriones cromosómicamente sanos.
Cuando comparamos FIV GENETIC con FIV normal, podemos notar que aplicando el PGT se reduce el tiempo para lograr un embarazo gracias al éxito del tratamiento.
El Preimplantation Genétic Testing para anomalías cromosómicas aumenta las posibilidades reproductivas, dado que permite seleccionar a los embriones cromosómicamente normales que se generan durante la Fecundación In Vitro.
Gracias a la posibilidad de seleccionar a los embriones cromosómicamente sanos.
La Fecundación in Vitro (FIV) es la unión del óvulo con el espermatozoide en el laboratorio-in vitro-, con el fin de obtener embriones ya fecundados para transferir al útero materno. La fecundación de los óvulos puede llevarse a cabo mediante técnica de FIV convencional o Inyección Intracitoplasmática de Espermatozoides (ICSI)
La Fecundación in Vitro con semen de pareja está indicada en:
La Fecundación in Vitro con donación de semen está indicado en casos de:
RESULTADOS
El 90% de los pacientes que siguen un tratamiento de reproducción en IVI quedan embarazados.
ATENCIÓN
El 97% de nuestros pacientes recomiendan IVI.
IVI ofrece atención personalizada y acompañamiento en todas las fases del tratamiento.
TECNOLOGÍA
IVI es pionero gracias a que usa la última tecnología de reproducción asistida para ofrecer los mejores resultados.
CALIDAD-PRECIO
No somos la opción más cara. Somos la que más alternativas de tratamiento ofrecemos para lograr resultados.
En nuestra clínica de Reproducción Asistida realizamos diagnósticos personalizados a cada uno de nuestros pacientes para aumentar la posibilidad de embarazo y así cumplir tu sueño.
Si el equipo médico de IVI determina que la Fecundación In Vitro con PGT es el tratamiento más adecuado para cumplir tu sueño y nuestro objetivo, se empieza con la estimulación ovárica.
La estimulación ovárica tiene como objetivo conseguir el mayor número de ovocitos maduros que pueda asegurarnos llegar con garantías a la trasferencia embrionaria. La mujer de forma natural produce entre 1 y 2 ovocitos en cada ciclo menstrual; con la autoadministración de hormonas se logra aumentar este número, dando la posibilidad de producir más embriones que luego van a ser analizados con la técnica PGT. Durante aproximadamente 10 o 15 días la paciente se autoadministra la medicación indicada por nuestros profesionales. Esta dosis varía dependiendo de la situación de cada mujer.
Con el fin de hacer un seguimiento del número de folículos producidos, la paciente deberá acudir a nuestro centro de Reproducción Asistida para realizarse ecografías y medir el nivel de estradiol en sangre. De esta manera se podrá controlar la evolución de los folículos y el endometrio, para programar la punción de los ovocitos en el momento más adecuado.
Una vez que el médico comprueba que el número y tamaño de los folículos es el adecuado se programa la punción folicular. La punción se lleva a cabo en el quirófano de nuestro centro de Reproducción Asistida y tiene una duración de unos 15 minutos. Como se aplica una sedación para que la paciente no sufra ningún tipo de molestias, se recomienda que la mujer se presente en la Clínica IVI acompañada.
Una vez que se obtienen los ovocitos y los espermatozoides de la pareja o de un donante, se realiza la fecundación de los óvulos en condiciones de cultivo in vitro. La inseminación de los óvulos se realiza en el laboratorio del centro de Reproducción Asistida IVI y puede lograrse de dos maneras. Una de estas es la técnica de FIV convencional en la cual el óvulo se coloca en la placa de cultivo rodeada de espermatozoides; mientras que con la técnica de ICSI (Inyección Intracitoplasmática) el óvulo es inseminado con una microinyección de un espermatozoide.
Los embriones obtenidos con la Fecundación In Vitro se observan en el laboratorio para ser clasificados por su morfología y capacidad de división. En el día 5º o 6º, cuando el embrión ya se encuentra en estado de blastocisto, se lleva a cabo el PGT. En IVI realizamos el PGT (Preimplantation Genetic Testing) a través de secuenciación masiva (NGS por sus siglas en inglés, Next-Generation Sequencing). El PGT para anomalías cromosómicas por NGS tiene una precisión del 99 % y es la tecnología de vanguardia para el diagnóstico de aneuploidias en FIV. Tiene mayor precisión que técnicas anteriores (arrays CGH, utilizada en IVI hasta junio de 2016 y FISH, primera técnica de diagnóstico de aneuploidias) y adicionalmente permite diagnosticar embriones mosaico. El término “mosaicismo” describe una situación en la cual células del mismo embrión tienen diferente cantidad de cromosomas. Para poder analizar los cromosomas genéticamente se realiza una biopsia en la cual se obtienen entre 6 y 8 células, sin poner en riesgo al embrión.
Mientras se realiza el Testing Genético Preimplantacional en las células obtenidas, los embriones son criopreservados hasta que se decida cuál va a ser el embrión sano que se va a transferir al útero de la mujer. Los embriones determinados como sanos se mantendrán criopreservados tras la transferencia con el fin de poder ser utilizados en otro ciclo sin necesidad de que la mujer deba realizarse una nueva estimulación ovárica.
Una vez realizado el PGT, el embrión se transfiere al útero materno. El transfer es un proceso rápido e indoloro que no requiere ningún tipo de anestesia y se realiza en el quirófano del Centro IVI. Luego de unos 10 minutos de reposo, cuando la paciente se sienta apta, ya se puede marchar y continuar con su rutina.
El ginecólogo indicará cuándo realizarse la prueba de embarazo en sangre, por lo general, 11 días después de la transferencia. Si resulta positiva, tras una ecografía de control, 20 días después se recibirá el alta por parte de IVI.
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