- La mejora del proceso de cultivo y selección embrionaria permite aumentar el potencial éxito de una implantación.
SANTIAGO, NOVIEMBRE 2022
Las soluciones con Inteligencia Artificial (IA) se están implementando cada vez más en distintos aspectos de sociedad, dando respuesta rápida en temáticas tan diversas como la política, la economía o la ciencia.
Así quedó demostrado en el último Congreso de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (ESHRE) realizada en Milán, Italia, donde se presentaron los resultados de varias investigaciones al respecto, destacando el estudio “Artificial intelligence (AI) based triage for preimplantation genetic testing (PGT); an AI model that detects novel features in the embryo associated with ploidy”, liderado por el doctor Marcos Meseguer, embriólogo y supervisor científico de IVI Valencia.
“Es un estudio pionero; por primera vez se combinaron 5 módulos independientes que analizan características del embrión por visión computacional, alcanzando así una precisión del 90% en la predicción de los embriones cromosómicamente normales”, explica Mikel Chivite, embriólogo, especialista en reproducción asistida y director del laboratorio de Fecundación in Vitro de IVI Santiago. “Consiste en una mejora del proceso de cultivo y selección embrionaria, lo que permite aumentar el potencial éxito de una implantación con un porcentaje de precisión sin precedentes”, agrega.
¿Cuál es el papel de la Inteligencia Artificial (IA)? Permite estudiar el embrión a través de algoritmos que evitan tener que manipularlo y extraerle células, por medio del análisis de los módulos de parámetros morfocinéticos, morfología del embrión, actividad celular, actividad mitocondrial y bombeo/contracción.
IA AL SERVICIO DE LA REPRODUCCIÓN ASISTIDA
Los laboratorios de Fecundación In Vitro (FIV) de IVI apostaron hace varios años por el desarrollo de IA, partiendo en Valencia de la mano del doctor Meseguer.
De esa manera se desarrolló, por ejemplo, el sistema KIDScoreD5, que analiza y clasifica los embriones automáticamente, aumentando la probabilidad de gestación y embarazo. Para lograr el desarrollo de este avanzado software, IVI realizó durante los últimos 3 años un estudio que reunió la mayor casuística de la historia científica hasta el momento: 20.000 embriones y 3.000 pacientes analizados. Mediante este estudio, IVI revolucionó la embriología, permitiendo tener una selección embrionaria universal, estandarizada y automática.
“El sistema KIDScoreD5 clasifica embriones automáticamente empleando Inteligencia Artificial, detecta y evalúa todos los pasos del desarrollo del embrión y además clasifica su morfología”, explica el doctor Meseguer.
En Chile, IVI Santiago es el único centro especializado en contar con el EmbryoScope, incubador de última generación que permite ver en pantalla el desarrollo del embrión, lograron obtener millones de imágenes del proceso, datos clínicos sobre el desarrollo embrionario preimplantatorio, y la capacidad de implantación en el útero materno.
La contribución más significativa en este campo pasa por la elaboración de modelos predictivos que ayuden a, profesionales y pacientes, a tomar decisiones médicas sobre el mejor tratamiento a seguir, analizando además otros tipos de variables demográficas, como la edad de los pacientes, índice de masa corporal, causas de infertilidad, respuesta y reserva ovárica, perfiles hormonales, calidad seminal, etcétera. Permite abordar los problemas con una estrategia más holística, teniendo en consideración muchos parámetros en su conjunto, y ayudando con ello a incrementar las tasas de éxito de las técnicas de Reproducción Asistida, optimizando los recursos y acortando el tiempo necesario para conseguir un embarazo y bebés sanos.
Finalmente, para todas las pacientes que recurren a la Ovodonación, el tema de si su bebé se les parecerá o no genera bastante ansiedad. Esto se soluciona con Perfect Match 360°, que permite obtener una máxima semejanza entre la donante y la paciente no solo a través de criterios fenotípicos (etnia, la complexión, el color de pelos y ojos, etcétera), sino también incorporando IVI Biometric Scan, tecnología que profundiza aún más los criterios de selección, físicos y genéticos. En este caso la Inteligencia Artificial permite realizar un completo estudio de similitud que, gracias al reconocimiento facial 3D, convierte el rostro en una fórmula matemática representada por 12.000 distancias biométricas para determinar el grado de parecido entre donante y paciente, y encontrar la mayor similitud.