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Por el Comité editorial de IVI Santiago
Feliz día a todas las madres, como cada segundo domingo de mayo desde los años 80, se festeja el Día de la Madre en Chile y en muchos otros países. Este año llega el 9 de mayo, con nuevas formas de celebrar la maternidad y, tal vez, optar por transitarla.
La maternidad es un camino de ida hacia nuevas formas de ver la vida. Ser madre es uno de los anhelos más grandes de muchas mujeres. Sin embargo, en ciertos casos algunas de ellas pueden sentir que deben “elegir” entre otros aspectos de su vida y la maternidad. Por otro lado, existen mandatos culturales heredados y presiones que son difíciles de desterrar.
Elegir ser madre es una de las decisiones más importantes de la vida. Definir cómo y cuándo convertirse en cuidadora y guía de otro ser humano, es una ventaja que hoy se tiene gracias a la Reproducción Asistida, para aquellas mujeres que necesitan de ayuda para gestar. Y todo ello, mejorando las posibilidades de llevar adelante un embarazo de forma segura y saludable.
Día de la Madre: una fecha para dejar las presiones a un lado
Las mujeres de todo el mundo están en medio de una transformación. Pero, todavía falta, y ese tiempo de cambio que lleva décadas, se hace lento para aquellas que hoy están decidiendo ser madres. De hecho, las mujeres chilenas tienen un alto grado de presión con respecto a la maternidad.
Algunos datos que arrojó una encuesta1 de 2019 de GFK-Adimark reflejan que:
- Casi el 50% de ellas se siente juzgada por su forma de criar a sus hijos.
- El 41% se siente presionada por ser la “mamá perfecta”.
Por otro lado, otro sondeo de la misma fuente revela que2:
- El 78% de las mujeres chilenas es madre.
- El 41% se siente estresada.
- El 6% tuvo problemas para lograr un embarazo.
De los datos arrojados por los sondeos se desprende que las presiones relacionadas con la maternidad son muchas. Pero las mismas pueden aliviarse con cambios culturales, y con libertad para elegir. La Reproducción Asistida puede ser de mucha ayuda en estos aspectos, ya que podría influir en que la mujer, al poder elegir cuándo y cómo ser madre, no deba dejar de lado otras ambiciones. Por otra parte, el día que decida tener hijos, puede estar en una mejor posición personal, económica y laboral, liberando varias presiones.
Nueva forma de maternidad
Más allá de la forma y el momento en que se decida ser madre, hay algo que todas comparten: el mismo anhelo por crear una nueva vida y acompañar a sus hijos a transitarla de la mejor manera.
Nuestra sociedad ha experimentado cambios notables en las últimas décadas, pero pocos tan llamativos como los que han llevado a la diversificación del panorama familiar. Hasta la
llegada de la democracia, sólo se consideraba legítima la familia compuesta por un hombre y una mujer, unidos por matrimonio religioso y con hijos biológicos habidos en común. La democracia trajo aires nuevos y cambios legislativos que han propiciado que hayan ido ganando en reconocimiento y legitimación todo un conjunto de realidades familiares que ya existían, pero estaban ocultas: las familias separadas que por fin podían divorciarse, las familias reconstituidas o combinadas (con hijos de uniones anteriores) que podían casarse,
las familias de madres o padres a solas y, más recientemente, las familias formadas por dos madres. También se han abierto vías legales para tener hijos o hijas por adopción, acogimiento permanente o reproducción asistida.
Las parejas de mujeres que deciden recurrir a la reproducción asistida para quedar embarazadas no tienen un diagnóstico previo de infertilidad. Muy al contrario, viven los tratamientos de reproducción como la ayuda necesaria para cumplir su sueño de ser madres y llegan a la clínica con la alegría y la ilusión de conseguir esta meta. Para algunas mujeres, ser madre es algo que siempre quisieron experimentar, para otras es algo que viene con el tiempo. Es un deseo que puede relacionarse con el presente o con la forma en que cada uno proyecta en el futuro. Puede ser un deseo personal, pero también puede estar relacionado con ciertas expectativas familiares o sociales. Todas estas motivaciones tienen una cosa en común: son transversales a todas las personas que desean tener un hijo, independientemente de su orientación sexual.
El tratamiento para que ellas se conviertan en madres
Conversamos con Daniela Vargas Psicóloga especialista en medicina reproductiva de IVI Santiago y nos comenta: “En esta experiencia ambas pacientes, participarán activamente del tratamiento en reproducción asistida. El método ROPA, traducido como recepción de ovocitos de la pareja, donde una será la madre genética y la otra la madre gestacional, que junto con la donación de semen conformarán y darán la posibilidad en la búsqueda de un hijo a una maternidad compartida.
Este embrión que se desarrollará en el útero de la madre gestacional vivirá cambios en su expresión genética. Desde la influencia epigenética, se vivirán estos cambios a consecuencia de la vivencia en el mundo intrauterino que traerá la modificación de un camino marcado por la gestación, brindándole a este ser humano en desarrollo una senda única.
La familia Homoparental es una invitación a preguntarnos por las nuevas formas de estructuración familiar. Cada nueva familia en este contexto confronta y exige la apertura e integración de estos nuevos modelos familiares.
El acompañamiento Psicológico para estas parejas de mujeres que desean ser madres también es muy importante, de manera de brindarles apoyo y contención, es un espacio de confianza para conversar, desahogarse y debatir de la experiencia que resuena de forma personal. Los desafíos que cada tratamiento invita, el cómo enfrentarlo de la mejor manera, las decisiones que deberán ir tomando. Esclarecer temores, hablar de expectativas e inseguridades. Los recursos que se portan. La red de apoyo que acompaña o no. Mitos para derribar, etc.”. Finaliza la especialista
Este 9 de mayo puede ser un buen día para celebrar y acompañar a aquellas madres que nos rodean. Brindarles apoyo para que no se sientan presionadas en su rol. Y, además, puede ser un buen día para celebrar a las futuras madres, a los nuevos modelos de madres: a las que se convertirán dentro de muy poco, a todas las madres que en definitiva cumplen un rol fundamental en la sociedad.
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